Tener la oportunidad de vivir en La Guajira sembró en nosotros la semilla de este modelo de negocio. Durante siete años pudimos evidenciar el talento, la dedicación y los retos que enfrentan las personas que habitan este territorio; y con frecuencia nos surgían preguntas relacionadas con cómo lograr que los proyectos e inversión fueran productivos y sostenibles en el tiempo, bajo criterios que les permitieran a las comunidades identificarse y apropiarse de ellos.
Luego de año y medio de estudios en negocios sostenibles aprendimos a entender las debilidades, oportunidades, fortalezas y amenazas que giran alrededor de este tipo de proyectos e identificamos que la aproximación a negocios de emprendimiento social podría ser una alternativa. Es así como, nos propusimos desarrollar un modelo de negocio que creara valor económico y social respetando la tradición artesanal wayúu para que, quienes así lo decidieran, pudieran vivir de este oficio.
Nuestro propósito consiste en transformar un negocio altamente informal, con una larga cadena de intermediarios en un esquema capaz de mejorar la distribución del ingreso, que permita que un mayor porcentaje de las ganancias lleguen al artesano. Así mismo, convertimos la trazabilidad de los productos en el eje del modelo, definiendo a las artesanas como el centro del negocio, acompañadas por diseños que fusionan la tradición y el arte contemporáneo.